El ARN mensajero que le ha valido el Nobel a Katalin Karikó y Drew Weissman y sus patentes

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El Premio Nobel para Katalin Karikó y Drew Weissman ha tardado en llegar, pero era más que esperado.

Sus descubrimientos sobre modificaciones de bases de nucleósidos que permitieron el desarrollo de vacunas de ARNm eficaces contra la COVID-19han sido, en palabras de la Academia Sueca, lo que les hace merecedores del galardón en la categoría Fisiología o Medicina 2023.

¿Qué es el ARN Mensajero?

El ARN es una molécula imprescindible para la vida y, por tanto, está presente en todas las células vivas siendo compuesto por moléculas básicas llamadas nucleósidos.

Existen diferentes tipos de ARN en las células, siendo los tres tipos principales:

  • ARN mensajero (ARNm),
  • ARN ribosómico (ARNr) y
  • ARN de transferencia (ARNt).

En concreto el ARN mensajero cumple un papel fundamental ya que actúa como un mensajero molecular que lleva la información genética desde el ADN hasta los ribosomas que son fundamentales para la estructura y función de las células; en ellos esa información se utiliza para la síntesis de proteínas. 

Para qué se usa el ARNm en Medicina

Desde 1990, los científicos sabían que inyectar ARNm sintético en células podría resultar en la producción de proteínas específicas bajo demanda. Uno de esos científicos era Katalin Karikó, quien ya en esa década planteó la idea de utilizar ese ARNm para curar a los enfermos bajo la premisa de que fuera su propio cuerpo el que fabricase el tratamiento.

Básicamente su propuesta consistía en introducir en las células la porción adecuada de ARNm para que se produzca la proteína que genere la respuesta necesaria contra una enfermedad o problema concreto. La bioquímica húngara ha contado que al principio comenzó por crear un ARNm diferente que codificaba la producción de una proteína de la que ya se sabía que aceleraba la cicatrización de heridas. Pero, aunque funcionara en células aisladas, no funcionaba en animales.

En esos tiempos es precisamente cuando Katalin Karikó y Drew Weissman coinciden en la Universidad de Pensilvania, en Estados Unidos, y trabajan juntos para obtener un ARNm menos reactivo que permitiese un uso terapéutico más seguro. En 2005 llega su momento “Eureka” al descubrir que el ARNt evita la reacción del sistema inmunológico por contener nucleósidos naturalmente modificados. Al introducir dichos nucleósidos modificados en  el ARNm, logran que el ARNm evite el ataque del sistema inmunológico y así pueda cumplir su función no solo en células aisladas, sino, más importante, en seres vivos. Estas modificaciones fueron esenciales para superar uno de los desafíos principales en el desarrollo de terapias basadas en ARNm.

A partir de ahí, comienzan numerosos proyectos como, por ejemplo, el uso de esa tecnología en una vacuna terapéutica contra el VIH utilizando una molécula de ARNm modificada con nucleósidos que Karikó y Weissman habían creado.

Las patentes de Katalin Karikó y Drew Weissman

Ambos investigadores galardonados ahora con el Nobel presentaron las patentes fundamentales para su trabajo en 2005 y a día de hoy ambos aparecen como inventores en las patentes europeas: EP2578685B1EP3611266B1, EP3287525B1, EP2510099B1EP3112467B1.

Sobre esa base en 2006 Karikó y Weissman crearon la empresa RNARx, pero la Universidad de Pensilvania vendió las licencias a una empresa diferente, lo que impidió que la compañía pudiera verdaderamente despegar.

En 2013, Karikó dejó ese proyecto y se trasladó a Alemania para seguir avanzando en sus investigaciones sobre la aplicación del ARNm desde la empresa BioNTech. Hoy en día BioNTech es titular de un buen numero de patentes y solicitudes de patente en las que la científica ha participado como inventora; ocho de ellas son solicitudes de patente europea, de las cuales se han concedido dos.

Drew Weissman, por su parte, sigue trabajando en la Universidad de Pensilvania como catedrático. Como inventor ha sumado un par de decenas de patentes más a su lista, aunque ninguna en Europa.

La guerra de Pfizer-BioNtech y Moderna por las patentes de la vacuna

La pandemia de Covid-19 catapultó el desarrollo de la tecnología de ARNm. De hecho, las vacunas de las farmacéuticas que ganaron la carrera por conseguir una solución (Moderna y Pfizer) la utilizan. Una de ellas, de hecho, salió de los laboratorios de BioNTech, que un tiempo antes (en 2018) se había asociado con Pfizer para impulsar vacunas contra el virus de la influenza (gripe) y, a raíz de las circunstancias, redirigieron ágilmente sus investigaciones para frenar al virus SARS-CoV-2.

No hubo sorpresa cuando, hace poco más de un año saltó la noticia de que Moderna demandaba a Pfizer-BioNTech ante los juzgados de Estados Unidos y Alemania por la infracción de varias patentes. El socio de ABG IP en la oficina de Barcelona y Agente de Patente Europea, Enric Carbonell, lo comentaba en esta tribuna que publicaba el periódico económico Cinco Días: Los líderes de las vacunas de ARNm contra el Covid, en los tribunales.

Hay que decir que las patentes que mantienen enfrentadas a las partes son posteriores (se solicitaron entre 2010 y 2016) a las que les ha valido el premio a Karikó y a Weissman, pero que, ciertamente, el desarrollo de esas vacunas no hubiera sido posible sin los avances previamente conseguidos por los galardonados.

Los ingresos de Pfizer y Moderna por la venta de sus respectivas vacunas se calculan en miles de millones de dólares; pero, más allá de lo económico, lo que está claro es que el valor de la invención a cuyos autores la Academia Sueca acaba de premiar es inconmensurable.

Hélio Roque
Hélio es asesor técnico en el departamento de Biotecnología & Ciencias de la Vida, donde su práctica profesional incluye la elaboración de informes de patentabilidad, redacción de solicitudes de patente y tramitación de patentes en el campo de la biología molecular y celular, farmacogenómica, terapia génica, inmunología, modelos animales y métodos de diagnóstico.
Antes de incorporarse a ABG, Hélio trabajó como investigador postdoctoral en la Sir William Dunn School of Pathology, de la Universidad de Oxford (Reino Unido) centrándose su actividad en el estudio en la regulación y estructura de los cilios y su función en las enfermedades designadas ciliopatías (2010 – 2017). Su trabajo de tesis doctoral lo realizó en el departamento de Biología Celular y Biofísica del Laboratorio Europeo de Biología Molecular (EMBL) y en la Universidad de Heidelberg, Alemania.

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